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A principios de 2022, las condiciones macrofinancieras cambiaron drásticamente con la guerra de Ucrania, la volatilidad de los mercados y la presión sobre los precios de las materias primas. Además, las continuas dificultades de la cadena de suministro contribuyeron a la preocupación de que la inflación pudiera ser más persistente de lo previsto. En el informe del Consejo de Estabilidad Financiera (FSB, por sus siglas en inglés) se hace un balance de la situación en la que el sector de intermediación financiera no bancaria (NBFI, por sus siglas en inglés) entró al año 2022 y se ofrece una visión de cómo podrían evolucionar las vulnerabilidades dadas las cambiantes condiciones macrofinancieras.
Este informe presenta los resultados del ejercicio anual de supervisión mundial del FSB, que abarca 29 jurisdicciones que representan alrededor del 80% del PIB mundial. El informe cubre principalmente los desarrollos de 2021, año durante el cual la mayoría de las economías experimentaron una recuperación mejor de la esperada por el impacto del COVID-19, en muchos sentidos debido a las extraordinarias medidas adoptadas por las autoridades oficiales del sector para apoyar los mercados financieros clave y la economía real. (Texto en inglés)
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