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El mundo se enfrenta a desafíos interconectados en materia de desarrollo, cambio climático y degradación ambiental. A pesar del progreso, los esfuerzos globales para abordar estos problemas se están quedando atrás. Los Informes Climáticos y de Desarrollo por País (CCDR, por sus siglas en inglés) del Banco Mundial tienen como objetivo identificar oportunidades para que cada país logre "doble beneficio" al abordar simultáneamente los objetivos de desarrollo y clima a través de inversiones y reformas.
Los CCDR destacan el potencial de que el desarrollo y la resiliencia se refuercen mutuamente, ya que las economías resilientes están mejor equipadas para manejar los choques climáticos. También señalan numerosas estrategias de adaptación rentables con altos retornos económicos y sociales. Además, los informes muestran que priorizar las vías de desarrollo con bajas emisiones puede generar un crecimiento económico similar o incluso más rápido en comparación con los enfoques tradicionales, pero lograr esto requiere un entorno propicio adecuado, políticas bien diseñadas y el apoyo de la comunidad internacional.
Se necesitan inversiones significativas para lograr un desarrollo resiliente y con bajas emisiones, y el sector privado juega un papel crucial. Existe la necesidad de esfuerzos bien coordinados entre diversos sectores y de la cooperación internacional.
Aprovechar las oportunidades identificadas en los CCDR requiere abordar desafíos como la gobernanza y la asignación ineficiente de recursos. Los informes sugieren formas en que los países pueden fortalecer sus marcos legales y optimizar el gasto de recursos. En general, los CCDR brindan información valiosa para que los gobiernos, las partes interesadas y el Banco Mundial prioricen las acciones, las inversiones y el intercambio de conocimientos, contribuyendo en última instancia a un mundo libre de pobreza en un planeta habitable.
(Texto en inglés)
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